Los locales del museo de la técnica darán lugar a un nuevo espacio museístico
El Ayuntamiento de Barakaldo ha aprobado esta mañana, en Junta de Gobierno Local, la cesión definitiva de los pabellones del Museo de la Técnica al Gobierno vasco. El objetivo de esta cesión es la creación de una muestra museística por parte del ejecutivo vasco relacionada con el pasado industrial del territorio. La alcaldesa de Barakaldo, Amaia del Campo y el viceconsejero de Cultura, Joxean Muñoz, han informado esta mañana sobre el proyecto, que albergará además un espacio cubierto de cerca de 3.000 metros cuadrados para el barrio. Así, los locales del Museo de la Técnica de convertirán muy pronto en un lugar destacado del pasado industrial. El Gobierno vasco se comprometió a trasladar a estos pabellones una muestra de maquinaria y elementos industriales "que sin duda se convertirá en toda una oportunidad para nuestra ciudad", ha asegurado Del Campo.
"Barakaldo tiene el sobrenombre de ciudad fabril, algo que llevamos con mucho orgullo, por lo que albergar este museo industrial es para nosotros una gran noticia", ha destacado, recordando que uno de los ejes más al alza en el turismo actual es el del turismo industrial, "un campo en el que nuestra ciudad tiene mucho que decir y aportar", ha explicado la alcaldesa. “El nuevo equipamiento resultará estratégico en el propósito municipal que iniciamos hace unos años: difundir y disfrutar del patrimonio industrial como un elemento de tracción turística a nuestra ciudad, no sólo desde los municipios de nuestro territorio sino del resto del Estado...”, ha indicado Del Campo.
Para poder llevar a cabo este proyecto, ha sido necesario ceder los locales a Gobierno vasco; una cesión que ha visto luz verde esta misma mañana en Junta de Gobierno Local. La aprobación de la cesión en Junta de Gobierno Local concluye con los trámites que se iniciaron el pasado año, con el compromiso por parte de Gobierno vasco de convertir esos locales de Lutxana en un espacio destinado a la historia industrial. Fruto de ese compromiso, el pasado mes de noviembre el pleno realizó un nuevo trámite a través del cual se dejaba sin efecto un antiguo convenio con Iberdrola para crear el museo de electricidad.
Espacio para el barrio
El acuerdo aprobado esta mañana recoge la cesión tanto de los dos pabellones del museo de la técnica como del espacio que se encuentra ubicado entre ellos, por un periodo de 50 años. La cesión contempla, además, la posibilidad de realizar trabajos de rehabilitación por parte del ejecutivo vasco. "Uno de los pabellones está completamente rehabilitado pero el otro necesito reformas, por lo que se deja la puerta abierta a que el propio Gobierno vasco pueda realizarlas", ha subrayado la alcaldesa.
Además, el proyecto contempla la creación de un gran equipamiento para el propio barrio. Se busca poner en valor el entorno del museo de la técnica y por ese motivo se propone cubrir el terreno que existe entre pabellón y pabellón, creando así una zona cubierta de cerca de 3.000 metros cuadrados que podrá ser utilizado por vecinos, asociaciones y colectivos del barrio en cualquier momento, “algo que nos demandaban los y las vecinas porque el barrio de Lutxana tiene mucha vida social y cultural”, ha señalado Del Campo.
El proyecto ya ha sido presentado a las asociaciones del barrio, que lo han acogido con gran expectación e ilusión.
“Desde luego, desde el Ayuntamiento estamos convencidos de que, además del valor histórico de la iniciativa, este proyecto supone una excelente oportunidad de impulso y revitalización en el barrio de Lutxana, aportando valor al espacio céntrico y que, en la actualidad se encuentra infrautilizado”, ha concluido la alcaldesa.
Una antigua aspiración
La idea de crear un museo en torno a la industria en Euskadi se remonta al año 1982, cuando el Ayuntamiento de Barakaldo adquirió a la empresa Altos Hornos de Bizkaia los pabellones y terreno de Orconera, en el barrio de Lutxana (Orconera Iron Ore, terminal del ferrocarril minero). Los edificios fueron cedidos al Gobierno Vasco y la intención inicial fue la de albergar el Museo de la Industria de Euskadi. En aquellos años se vivía una crisis muy dura y numerosas empresas industriales optaron por cerrar o renovarse por completo. Como consecuencia de aquel declive de la industria, se fue acumulando material empresarial y se creó una interesante colección de materiales que reflejaba la diversidad industrial de Euskadi.
Buena parte de aquel material se instaló en los locales de Orconera, y se llegaron a ocupar dos naves con material de todo tipo, desde elementos del laboratorio del Altos Hornos de Vizcaya hasta locomotoras o camiones de bomberos. Sin embargo, los problemas económicos, pero también las diferencias en torno al concepto de lo que debía ser el museo paralizaron el proyecto.
Así, en 2002, a la vista de que el proyecto no avanzaba, el Ayuntamiento de Barakaldo solicitó los locales para darles un nuevo uso. Las emblemáticas instalaciones de Orconera en Lutxana se vaciaron y la colección se llevó a Zorrotzaurre, a las instalaciones de la antigua empresa Consonni, que en su día fue fabricante de frenos de tranvía y componentes de motores eléctricos. La colección se denominó Konsoni Lantegia, y desde el año 2017 comenzó a ser visitada de manera regular a través de un programa de visitas guiadas impulsado por el Gobierno Vasco en colaboración con la Asociación Vasca de Patrimonio Industrial y Obra Pública (AVPIOP).
Al margen de esa vía de Konsoni Lantegia, a lo largo de las últimas décadas otros museos han recogido el patrimonio industrial en sus colecciones. Euskadi, asimismo, fue la primera comunidad en realizar un inventario provisional del patrimonio industrial, entre los años 1990 y 1994. Por otro lado, gracias al trabajo de diversas instituciones e individuos, se han conformado importantes colecciones.
De esta manera, gracias a la labor de casi cuatro décadas, los elementos y contenidos necesarios para conformar una colección del patrimonio industrial vasco estaban ya recopilados, y únicamente faltaba impulsar un proyecto concreto y determinar el lugar idóneo para albergarlo.
En Orconera
El Ayuntamiento de Barakaldo y el Gobierno Vasco llegaron el pasado año a un acuerdo a fin de retomar el proyecto de impulsar un museo o colección del patrimonio industrial vasco. La decisión del Consejo de Gobierno hoy hace efectiva la cesión al Gobierno Vasco de las antiguas instalaciones de Orconera, a donde en las próximas semanas se comenzará a trasladar el material almacenado en Konsoni Lantegia. El objetivo es que la Colección de Patrimonio Industrial Orconera-Lutxana se pueda comenzar a visitar a partir de otoño.
Orconera Iron Ore Company Limited fue una empresa que desempeñó un papel importante en la industrialización de Euskadi. Fundada en Londres en 1873 con capital internacional, su objetivo era explotar el hierro de las minas Magdalena, Orconera, Previsión, Carmen, Ser, San Antonio, Mora y Unión. En una parcela de 9.387 metros cuadrados se dispone de unos 1.400 metros cuadrados distribuidos en dos pabellones paralelos del mismo tamaño: Orkonera Sur (715 m) y Orkonera Norte (710 m). Entre ellos se encuentra una amplia explanada cubierta de hierba. Los pabellones son grandes y diáfandos, y constituyen un magnífico ejemplo de arquitectura industrial simple y funcional.
La colección
El material almacenado en Konsoni y que será trasladado a Orconera es muy variado y cuenta con cerca de 2.000 piezas catalogadas. Entre los elementos de esta colección se encuentran desde la rotativa del diario Euzkadi hasta una grúa portuaria pasando por piezas de armerías eibarresas, las motos de la marca baracaldesa Lube o las maquetas de la planta de Petronor en Muskiz.