Arrancan las obras para la instalación de los ascensores de Etxetxu y Arteagagoiko
Las esperadas obras para eliminar las actuales escaleras mecánicas de Arteagagoiko, que sufren averías de manera constante, ya han comenzado. También el barrio de Rontegi ve cómo se inician los trabajos para instalar un ascensor urbano que acabe con los problemas de accesibilidad entre la calle Etxatxu y el grupo San Luis. Ambos actuaciones suponen una inversión de 1,3 millones de euros para el Ayuntamiento y que pronto serán una realidad, conectando de manera más cómoda y accesible los barrios de la ciudad.
En la zona de Arteagagoiko se sustituirán los tres tramos actuales de escaleras mecánicas por dos ascensores panorámicos que conectarán la parte alta de la Avenida Euskadi con el parque de las esculturas. La obra, que ha sido adjudicada por 1,1 millones de euros, también incluye la creación de una nueva rampa peatonal, escaleras, acometidas nuevas de luz, telefonía, fibra óptica y alumbrado público.
El primer ascensor salvará un desnivel de 5,76 metros de altura y el segundo, el que conecta con la parte superior, salvará 6,43 metros de altura. Las obras se ejecutarán de manera secuencial compatibilizando el desarrollo de la urbanización en la zona, salvando así las 71 escaleras existentes en el entorno. Cada uno de los ascensores tendrá capacidad para 13 personas y las pasarelas que van a unir los ascensores tendrán una longitud de 12,30 metros.
“Estas escaleras no han traído más que problemas desde su instalación. Nos comprometimos con los y las vecinas del barrio para cambiarlas, y ya que íbamos a actuar en la zona, hemos apostado por la construcción de ascensores que es una solución que resuelve de manera completa la accesibilidad en ambos sentidos, tanto para subir como para bajar”, explica la alcaldesa, Amaia Del Campo. Las obras tienen un plazo estimado de ejecución de 10 meses y un presupuesto de 1,1 millones de euros.
Por su parte, el barrio de Rontegi acoge las obras de instalación de un nuevo ascensor panorámico entre la calle Etxatxu y el grupo San Luis. En la actualidad, ambas zonas están separadas por largas escaleras que dificultan la conexión para las personas con movilidad reducida. El nuevo ascensor urbano acristalado salvará un desnivel de 20 metros, contará con doble embarque a 180º e irá adosado a la pared existente junto a las escaleras. Las dimensiones de la cabida serán de 110 x 140 cm. Para su instalación será necesario demoler la solera existente en el nivel inferior y ejecutar un foso enterrado de en torno a 110 cm de profundidad, de forma que el ascensor desembarcará a nivel de la calle.
Para mejorar la seguridad de la zona, se trasladará el paso de cebra existente en la plaza San Luis para que se sitúe enfrentando al ascensor, por lo que se modificará la urbanización de ese entorno.
Tras haber quedado el primer concurso público desierto, el Ayuntamiento aumentó el presupuesto base de licitación hasta los 271.021 euros. El plazo estimado de ejecución es de tres meses.