Bizkaia licita la construcción del puente entre Barakaldo y Erandio

Amaia del Campo, Elixabete Etxanobe, Imanol Pradales y Aitziber Oliban

La estructura móvil supone un importante punto de conexión entre Barakaldo y la Margen Izquierda con el Bulevar de la ría, que acogerá los desplazamientos de peatones y ciclistas a partir de 2025

El consejo de gobierno de la Diputación Foral de Bizkaia aprueba el proyecto y cumple un nuevo paso para hacer realidad el puente que unirá las redes ciclistas de Ezkerraldea y el Bulevar de la margen derecha, infraestructuras que estarán finalizadas en 2025. El proyecto ha sido mejorado incluyendo una gran plaza sobre la lámina de agua con la que Erandio gana 1.970 metros cuadrados de espacio urbano. La Diputación realizará una inversión de 25,9 millones de euros en los trabajos de construcción, que tendrán una duración estimada de dos años y medio.

460 metros de longitud

Las ingenierías SBP, CALTER y FULCRUM firman esta nueva pasarela que unirá las redes ciclistas de Barakaldo y la Margen Izquierda con el Bulevar de la ría, facilitando que la ciudadanía de ambas márgenes pueda optar por realizar sus desplazamientos habituales en bicicleta o a pie. Así mismo, al tratarse de un puente móvil, garantiza la navegabilidad de la ría en las mismas condiciones de hoy en día. 

Si bien la anchura del cauce de la ría en el punto en que se ejecutará el puente es de 240 metros, la longitud total de la estructura será de 460 metros en un trazado diseñado en curva para integrar los aterrizajes del puente en las dos orillas y para hacer más cómodas las pendientes a ciclistas y peatonales.

El ancho útil de la pasarela será de seis metros, de los cuales tres se destinarán al uso peatonal y otros 3 al ciclista, estando ambas franjas segregadas entre sí.  El puente integrará así mismo mobiliario urbano y contará con iluminación.

Un puente móvil

Según se define en el proyecto constructivo, la estructura se apoyará sobre 12 pilas ancladas al lecho de roca y distribuidas en dos tramos fijos y dos tramos móviles que se abrirán girando en el sentido de las agujas del reloj, de modo que en el tramo más cercano a Barakaldo el vano central quedará orientado aguas arriba, y en el de Erandio, aguas abajo.

El canal navegable bajo el puente tendrá una anchura de 50 metros y la inmensa mayoría de barcos que navegan por la ría pasarán con el puente cerrado, ya que el diseño presenta un gálibo libre bajo tablero de 6,5 metros en pleamar. Tomando como referencia el tráfico fluvial actual, el puente se abriría dos veces por semana para permitir el paso de embarcaciones de mayor porte.

Respecto a los materiales, las pilas, estribos y lastres del puente se realizarán en hormigón armado, y la sección estructural en diferentes aceros que responden a los requerimientos mecánicos de cada una de las partes; el tablero y los mástiles y las velas que constituyen el sistema de atirantado de los dos tramos móviles. Entre las mejoras introducidas en el proyecto constructivo se han reforzado las cimentaciones y las pilas de la estructura, adecuándolas a los diferentes esfuerzos a los que estarán sometidas.